El Gobierno derogó el Decreto Supremo que introducía una nueva reglamentación al proceso regulatorio de distribución eléctrica e impedía un reducción de 6 por ciento a los usuarios del servicio.
La norma originó discrepancias entre el Ministerio de Energía y Minas y el organismo regulador Osinergmin, responsable de fijar las tarifas del servicio eléctrico.
Se sabe que la diferencia se agravó y desde el Gobierno se habría solicitado mayores explicaciones al ministerio de Energía y Minas. Esto generó la salida del viceministro, Raúl García.
El regulador se mostró en contra de la norma del MEM dado que modificaba un procedimiento que está en curso y que debía concluir el 16 de octubre con la publicación de la tarifa de distribución eléctrica final.