Hermes Sifuentes Hinostroza tomó oficialmente las riendas del rectorado de la Universidad Nacional de Trujillo para el periodo 2025 – 2030 y dentro de sus primeras medidas anunció la suspensión de los controles biométricos para los docentes.
Tras este anuncio, el exrector de esta casa superior de estudios, Carlos Vásquez, espera que Hermes Sifuentes haya encontrado un nuevo método eficiente para lograr que los docentes cumplan a cabalidad su labor académica.
“Que me imagino habrá encontrado un mecanismo mucho más eficiente y eficaz para garantizar que la docencia cumpla fielmente con sus obligaciones lectivas y evitar que afecten a los estudiantes incumpliendo con el dictado de clase para ir a dictar a las universidades privadas o realizar actividades profesionales paralelas a su presencia en el aula”, señaló el exrector universitario.
Vásquez Boyer también resaltó que sería un retroceso grosero que nuevamente se instaure las hojas de asistencias, precisando que de darse este sistema retrógrado debería intervenir la Contraloría General de la República.
“No creo que vuelva a la firma de hojas de asistencias, eso sí sería una burla y la Contraloría tendría que intervenir pidiendo una explicación al nuevo rector. Lejos de avanzar sería un grosero retroceso. Tenemos que fortalecer el serio proceso formativo de nuestros estudiantes y futuros profesionales”, declaró para Macronorte.pe.
Por su parte, el abogado y docente de la UNT, Miguel Rodríguez, señaló que personalmente no respalda esta medida que adoptará la nueva gestión rectoral, pero que respeta que Hermes Sifuentes esté cumpliendo con sus promesas de campaña electoral.
“El retiro del reloj biométrico ha sido parte de la campaña electoral y que ha concretado su anuncio de retirar el control biométrico. En lo particular, yo no estoy de acuerdo porque soy un convencido que en general todos los trabajadores y las personas necesitamos algún tipo de control de evidencia de nuestras actividades”, indicó Rodríguez Albán.
“Las personas responsables no necesitan que las controlen, pero siempre hay un marco o un porcentaje que hace un uso y abuso de las libertades, en este caso, cuando no hay un control de ingreso y de salida al aula que esté evidenciado, diríamos de concretarse una falta o una tardanza con el descuento respectivo, lo que se venía haciendo a los docentes y esto generaba una reacción negativa”, puntualizó.
Finalmente, el catedrático y político liberteño resaltó que esta medida le deja una sensación de populismo por parte de la autoridad universitaria.
“Esas medidas a veces tienen un tufillo populista, que no necesariamente es lo más racional, desde mi punto de vista se pudo haber anunciado el retiro del reloj biométrico, pero por ejemplo que el aula virtual sea otra forma de control”, declaro para este medio de comunicación digital.