El presidente de la Asociación de Exportadores (ADEX), Julio Pérez, señaló que la informalidad en nuestro país es el resultado de una serie de factores como un régimen normativo carente de iniciativas promotoras, que solo legisla para un reducido y privilegiado segmento de la población y la poca capacidad del Estado en gestionar y ejecutar acciones, lo cual solo incrementa el nivel de pobreza en la población más vulnerable.
Este pronunciamiento lo realizó durante el conversatorio ‘Formalizando el Trabajo desde el Comercio Exterior Peruano’, organizado en el marco del Día del Exportador, a celebrarse el próximo 9 de noviembre; y en el cual se abordó el tema ‘la formalidad como pieza clave para el éxito en el sector exportador’.
“La falta de oportunidades laborales induce a las personas a trabajar en condiciones precarias con menores ingresos y sin beneficios sociales agudizando sus niveles de pobreza. Se calcula que el empleo informal en Perú llega al 80%”, precisó.
Asimismo, Pérez Alván remarcó que la informalidad se incrementó tras la pandemia y tiene como principal consecuencia el poco nivel de desarrollo y baja productividad. Además, añadió que el 92% de las empresas exportadoras son pequeñas y micro, con mucho entusiasmo de emprendimiento, pero con poca tecnificación y preparación, por lo cual su nivel de mortalidad es alto.
Indicó también que una vía para combatir la informalidad es insertar a los productores y artesanos de las diversas regiones a la cadena exportadora, capacitándolos en calidad, asociatividad, requisitos de mercado y otros temas más, a fin de que sean más productivos.
El presidente del gremio señaló que un trabajo pendiente es evidenciar las ventajas de ser formal, tarea en la cual está abocada ADEX. “Que Perú se ubique en las primeras posiciones como proveedor de alimentos es una clara señal del potencial de la formalidad”, aseveró.
Resaltó que las cadenas productivas exportadoras generan puestos de trabajo e ingresos dignos, mencionó a la agroindustria con 262 empleos por cada millón de dólares exportados, el agro tradicional con 635, las prendas de vestir 329, maderas 302, pesca no tradicional 164 y textiles 158.