Las extorsiones no cesan en la región. Una funeraria ubicada en el distrito de Guadalupe sufrió un atentando luego de que extorsionadores detonaran un artefacto explosivo en las inmediaciones del local.
Esta explosión causó graves daños a la funeraria, entre ellas las puertas de metal y ventanas. Además, provocó que las tapas de los medidores de luz se destruyeran, asimismo, causó daños en la vivienda colindantes.
En el lugar se encontró una carta de extorsión para el dueño de la funeraria. Ante esto, la victima señaló que no había recibido amenazas y tampoco tiene problemas con ninguna persona.
Finalmente, efectivos policiales llegaron hasta la zona para realizar las investigaciones correspondientes de ley.