El exgerente de Desarrollo Social de la Municipalidad Provincial de Trujillo, Wilmar Moreno, señaló que las subvenciones económicas que viene entregando la gestión de Mario Reyna a las organizaciones sociales de base tendría un aprovechamiento político.
“Lo que nosotros estábamos ya denunciando hace ya mucho tiempo, esta alianza o cogobierno entre Dina Boluarte y APP, no solamente en el Congreso de la República, sino también de copamientos de diversas instituciones del Estado viene reflejándose hoy en día en algo que nosotros habíamos pensado que ya había desaparecido, el famoso «festín de las subvenciones económicas» o el uso de los recursos públicos en los programas sociales”, declaró para Macronorte.pe.
“Estas subvenciones económicas que viene repartiendo en las organizaciones sociales de base, llámese ollas comunes, comedores populares, clubes de madres; viene haciéndose a través del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, un ministerio que fue bastante cuestionado a nivel nacional por la distribución de alimentos en pésimo estado a los niños en edad escolar. El Midis en convenio con la Municipalidad Provincial de Trujillo viene en esta oportunidad distribuyendo subvenciones económicas, no en alimentos como suele entregarse siempre, sino esta vez en efectivo, en dinero contante y sonante, es bien raro, nosotros pensábamos que eso ya había desaparecido, era en la época cuando fue alcalde Acuña Peralta”, puntualizó.
Para el también coordinador regional del Partido Político Fe en el Perú cuestionó que esta entrega de dinero es una demostración que están volviendo los festines de las subvenciones económicas en época electoral.
“Lo que llama la atención, es que esto se está entregando precisamente cuando ya estamos entrando el año 2025 a una campaña preelectoral, digamos ya electoral porque muchos partidos ya empezaron sus campañas electorales y la Municipalidad Provincial de Trujillo y el gobierno regional, también APP aliado con el gobierno central (Ejecutivo) no se han querido mantener al margen. Nosotros vemos esto como un uso peligroso de las subvenciones económicas para gente muy necesitada, en este caso las organizaciones sociales de base. El festín de las subvenciones económicas ha vuelto”, remarcó Moreno.