La Contraloría General de la República, durante una visita de control, detectó riesgos que podrían afectar la adecuada construcción de la planta de transferencia, donde se tratarán los residuos sólidos de la provincia de Chiclayo, en la región Lambayeque, infraestructura que tiene un valor referencial de S/10’486,600.33.
Los riesgos se encuentran plasmados en el Informe de Visita de Control N° 003-2018-OCI/0425-VC, que ha sido notificado a la Municipalidad Provincial de Chiclayo para que valore los aspectos comentados y adopte las medidas correctivas pertinentes, sean de carácter administrativo o legal, y que deben ser comunicados a su vez al Órgano de Control Institucional (OCI) de la entidad edil.
De igual forma, se encuentra publicado en el portal institucional www.contraloria.gob.pe, conforme lo dispone la nueva Ley de Fortalecimiento de la Contraloría y del Sistema Nacional de Control en aras de la transparencia y el acceso a la información.
Principales riesgos advertidos:
La empresa contratista Constructora CRD SA Sucursal Perú estaría utilizando partidas presupuestales para adquirir material de relleno traído de otras zonas (de préstamo), distinto al que establece el expediente técnico. Además, no propone cambios para mejorar la calidad de la obra, en cumplimiento de los procedimientos que establece el contrato. Esto podría ocasionar riesgos de retrasos y paralizaciones en la ejecución de los trabajos.
Se evidenció la inasistencia injustificada del residente y supervisor de obra, lo cual originaría el riesgo de no velar directa y permanentemente en la correcta ejecución de los trabajos.
El contratista habría eliminado el material excedente e inservible producto de las excavaciones en otro botadero particular, fuera de lo que establece las especificaciones técnicas, lo cual ocasionaría contaminación ambiental.
El proyecto “Planta de Transferencia de los residuos sólidos municipales de la localidad de Chiclayo” se ejecuta mediante un acuerdo entre la Confederación Suiza, la Agencia Peruana de Cooperación Internacional, el Ministerio del Ambiente y la Municipalidad de Chiclayo. En las nuevas instalaciones se concentrará la basura de la ciudad antes de derivarla al botadero final, ubicado en el distrito de Reque.
La Contraloría, a través de sus órganos de control, comparte oportunamente los riesgos identificados a los ejecutores producto de las intervenciones, con la finalidad de mejorar los procesos, garantizar la calidad de las obras y que las mismas sean en beneficio de la ciudadanía.