Tras haberse rehabilitado, después de más de 20 años de permanecer cerrado, el aeródromo de Urpay, en la provincia de Pataz, vuelve a recibir avionetas. Este viernes, pasadas las 10 de la mañana llegará en el primer vuelo el gobernador regional Manuel Llempén Coronel, junto a la nueva prefecta de La Libertad, Carolina Velasco, a quien invitó, y otras importantes autoridades.
El mandatario regional destacó lo trascendental que será para la población de los distritos de Urpay, Tayabamba y otros cercanos, contar con una ruta rápida de evacuación ante alguna emergencia o aislamiento, principalmente por problemas de salud como el Covid-19.
“Viajar por tierra demandaba muchas horas, más cuando las lluvias ocasionaron problemas en la carretera. Ahora, volando en avioneta, podrán estar en Trujillo en 35 minutos”, dijo Llempén.
Por otra parte, manifestó su preocupación por que al parecer los trabajos que se vienen haciendo en el puente Chacas no van a estar listos para diciembre y si las lluvias son fuertes ocasionarán aislamientos, lo que se podrá evitar gracias al funcionamiento del aeródromo.
El gobernador regional fue uno de los impulsores de la recuperación de la pista de aterrizaje, junto a al consejero por la provincia, Luis Rodríguez; el acalde distrital de Urpay, Bary Mendoza; y el alcalde provincial de Pataz, Omar Iparraguirre, a lo que se sumaron la Cía. Minera Coriwayra y Aeroprop SAC.
Este aeródromo, cuya pista de aterrizaje tiene poco más de mil metros de longitud, tiene autorización indefinida del MTC y estará sujeto a inspecciones inopinadas.
Pataz tiene grandes problemas de conectividad durante la temporada de lluvias y el tiempo utilizado para trasladarse a Trujillo ante alguna emergencia era mucho, por lo que se agotaron las gestiones necesarias para que se autorice el uso del aeródromo, recordó Llempén.