Las familias peruanas no solo han sido víctimas de la pandemia, sino que también están sufriendo una crisis alimentaria y económica por los impactos de la guerra entre Rusia y Ucrania, razón por la que 35 % de los peruanos en situación de pobreza perdieron su capacidad de ingresos, teniendo que sustituir productos como el pollo, huevos, etc., para alimentarse.
Dado que los precios internacionales de los granos de trigo son volátiles en el marco de las crisis mencionadas, la canasta básica de las familias peruanas se ven vulneradas, subiendo los precios del pan, de los huevos, del pollo, etc.
Según el exministro de agricultura, José Hernández, el 10 % de arroz, el 15 % de azúcar y el 100 % de aceite de soya importadas son importadas; además, el 76 % de maíz para pollos también.
¿Qué hace el Gobierno para revertir la situación?
“Si tuviésemos que sustituir todo lo que importamos de granos de trigo, tendríamos que sembrar 1 millón 200 mil hectáreas en el Perú, es decir, más del 25 % más de lo que hoy sembramos con todos los cultivos”, detalló José Hernández.
De acuerdo a la exautoridad ministerial, no se puede cambiar la matriz de producción en corto tiempo, pese a que se destina 4 millones 300 mil hectáreas en la actualidad para la agricultura.
Además, afirmó que el Perú no es un país productor de granos, ya que la producción es diversificada entre frutos y hortalizas para la exportación, por lo que es improbable competir con los productores de granos internacionales.