Según un informe del Comité Multisectorial Encargado del Estudio Nacional del Fenómeno El Niño estima que para el otoño alcance una magnitud entre fuerte y moderada, mientras que para la estación de invierno y primavera sería moderada. Asimismo, para el verano de 2024 la magnitud más probable estaría entre moderada y débil.
De otro lado, precisaron que, en el Pacífico Central, la probabilidad del desarrollo de El Niño sería a partir de junio, debido a que las condiciones cálidas alcanzarían una magnitud débil hasta setiembre, seguida de una magnitud moderada en octubre.
Para el trimestre junio-agosto de 2023, se prevé precipitaciones ligeramente sobre lo normal en la costa norte y centro, caracterizadas por la ocurrencia de lluvias localizadas y lloviznas, mientras en el verano de 2024, es probable la ocurrencia de lluvias de moderada a fuerte intensidad principalmente en la costa y sierra norte.
Es de señalar que, respecto a los animales marinos, debido a la probable persistencia de las condiciones cálidas anómalas, se mantendría la disponibilidad y accesibilidad de los recursos caballa y bonito. Por otro lado, es probable que la población de los individuos adultos de merluza presente una alta dispersión y desplazamiento hacia el sur de su distribución normal.
Ante esta posible situación, el ENFEN recomienda tener en cuenta los posibles escenarios de acuerdo con el pronóstico estacional vigente y las proyecciones para el verano 2024, con la finalidad de que se adopten las acciones que correspondan para la reducción del riesgo y la preparación para la respuesta.