La gestión del polémico alcalde de la provincia de Trujillo, Arturo Fernández, viene pintando los árboles que se ubican en la Plaza de Armas del centro histórico de la ciudad, conjuntamente con las farolas de iluminación.
Tras ser consultado si cuenta con el permiso para pintar los árboles, la excéntrica autoridad edil, fiel a su estilo hilarante, manifestó que solo le pide permiso a Dios para realizar estos trabajos.
“A Dios lo que es de Dios, los árboles son de Dios, no le pertenecen a ningún partido político, ni mucho menos a personas que están de guardianes de los partidos políticos en las instituciones, así que yo no tengo ningún problema en hacer las cosas porque los permisos los pido ante Dios”, manifestó.
Es de señalar, que la Dirección Desconcentrada de Cultura de La Libertad solicitó al alcalde Fernández Bazán, la paralización de estos trabajos no autorizados, sin embargo, el autodenominado ‘Loko de Moche’ ha hecho caso omiso a la exhortación de la institución cultural y continúa con la remodelación de la plaza Mayor de Trujillo, incluso ha instalado luces led en los árboles, los cuales son considerados patrimonio cultural, según el titular de la DDC, David Calderón.
De otro lado, referente a su salida del cargo edil, Arturo Fernández señaló que no se aferra al sillón municipal, puesto que su misión en el mundo es verse como hijo de Dios.
“Yo tengo otra misión en este planeta, la misión no es quedarse en un cargo, aferrarse, eso es soberbia, yo aquí he venido a cumplir mi labor, sentirme bien conmigo mismo, que mi motivo de vida sea positivo para la ciudadanía. Yo me veo como hijo de Dios”.
