El ministro de Defensa, Walter Ayala, aseguró que los cambios de los comandantes generales del Ejército y la Fuerza Aérea no son producto de una represalia del presidente de la República, Pedro Castillo, por no haber atendido sus supuestos pedidos para ascender a los coroneles Fidel Bocanegra Burga y Ciro Bocanegra Loayza, quienes son hijos del profesor Augusto Enrique Bocanegra Gálvez, natural de Chota y conocido de Castillo Terrones.
“Supuestamente (es por estos ascensos). Prácticamente son rumores, trascendidos. Son comentarios. Le digo la verdad, a mí los comandantes generales me proponen una lista de ascensos. Lo que yo hago es lo reviso, muy bien, lo firmo. No lo revisé”, detalló la mañana del sábado 6 de noviembre a Exitosa.
El general de división EP José Vizcarra Álvarez que fue pasado al retiro, informó a mediados de octubre al presidente Castillo que la lista de ascensos ya estaba cerrada, luego que se le diera a conocer que el jefe de Estado tenía a los hermanos Bocanegra como candidatos para que sean ascendidos a generales de brigada. Sin embargo, en la lista de ascensos publicada el 24 de octubre, no figuraron los nombres de ambos coroneles.
“(Pedro Castillo) tenía la potestad, la prerrogativa de observar (los ascensos). Yo firmé y se lo llevé al presidente de la República y el presidente también los firmó y se publicó. Si el presidente no hubiese querido, simplemente no lo firmaba. ¿Por qué iba a presionar, si el presidente quería no firmaba? Es su prerrogativa constitucional”, refirió Ayala.
De otro lado, Ayala Gonzales indicó que las resoluciones supremas que estipulaban la salida de los dos comandantes generales ya estaban firmadas desde días antes de que fueran publicadas, el mismo día que se le otorgó la confianza al Gabinete de Mirtha Vásquez en el Congreso.
“La resolución suprema ya estaba hace más o menos una semana. No se sabía si iba a salir o no porque yo como ministro estaba con medio pie. Yo sí tenía conocimiento, pero las decisiones muchas veces en el camino quedan. Yo mismo, como ministro, estaba a punto de salir, se voceaba mi reemplazo. Muchas veces (estas decisiones) se enfrían”, comentó.