Se lava las manos. Arturo Fernández intentó realizar un deslinde de la firma del contrato de la presunta sobrevalorización en la obra “Mejoramiento del servicio educativo en la institución educativa N° 1685 María Inmaculada en la urbanización Mochica, distrito de Trujillo – provincia de Trujillo – departamento de La Libertad” y señaló que cuando Mario Reyna estuvo de alcalde encargado no observó la presunta sobrevaloración de la obra.
«Cuando era alcalde encargado el señor Mario Reyna, junto a su gerente de obras, manda observaciones. ¿Cualquiera dice del precio? No, observaciones de que tal dueño de la obra le falta tal y tal documento, pero nunca objetaron el precio», acotó Fernández Bazán.
Sin embargo, lo que queda claro es que Carlos Merino Ramírez, entonces Administración y Fianzas Económicas de la Municipalidad Provincial de Trujillo, Carlos Merino Ramírez, firmó el contrato con el cuestionado consorcio SNORL.AX, cuando Fernández Bazán ya había retomado funciones de alcalde.
Asimismo, la polémica autoridad edil señaló que el citado funcionario ingresa a laborar el pasado 9 de marzo de 2023 a la MPT y que es notificado que se encuentra inhabilitado para cumplir función pública recién el 31 de marzo del año en curso.
Es de señalar, que el contrato de la citada obra se firmó el 23 de marzo y según el alcalde, para esa fecha de suscripción de contrato su funcionario no estaba sancionado o no sabía que lo estaba, sin embargo, en el Registro Nacional de Sanciones contra Servidores Civiles con fecha 18 de marzo de 2023, Carlos Merino Remires ya figuraba como inhabilitado por el Poder Judicial y contaba con sanción vigente (privación de la función, cargo o comisión que ejercía el condenado, aunque provenga de elección popular).
Con estos argumentos el alcalde Fernández buscaría deslindar cualquier responsabilidad, además, que indicó que el asesor legal de la comuna edil ha señalado que cada gerente es responsable de sus actos.