Se burla de la justicia. Este martes 17 de octubre, el sentenciado y suspendido alcalde de la Municipalidad Provincial de Trujillo, Arturo Fernández Bazán, debió afrontar una nueva audiencia en su contra por el presunto delito de difamación en agravio del exdirector del Proyecto Arqueológico Huacas de Moche, Ricardo Morales Gamarra, sin embargo, por segunda vez fue reprogramada para el próximo 28 de noviembre a las 10 de la mañana.
La defensa legal de Fernández Bazán no se presentó a la audiencia por motivos de salud, en ese sentido, el abogado de oficio, defenderá de la histriónica autoridad edil, solicitó la postergación para estudiar el expediente legal hasta la fecha reprogramada.
En declaraciones para Macronorte.pe, Ricardo Morales cuestionó que el disociador alcalde esté postergando esta audiencia y la calificó como una artimaña.
“Se suspendió por segunda vez. El alcalde justificó la ausencia de su abogado por motivos de salud y el abogado de oficio solicitó postergación para estudiar el expediente hasta el 28 de noviembre a las 10 de la mañana, que es la nueva y definitiva fecha. Es una artimaña que tendrá su rechazo en algún momento, el fin de la jugarreta está cerca y la sentencia es inevitable”, manifestó Morales.
Es de señalar, que la denuncia que interpuso el arqueólogo contra la polémica autoridad edil, remonta en el 2019, cuando Arturo Fernández fungía como alcalde del distrito de Moche. En ese entonces, Fernández Bazán quiso realizar un camino ubicado en inmediaciones de las huacas en la Campiña de Moche; sin embargo, hubo una negativa por parte del Proyecto Huacas de Moche.
Ante la oposición del arqueólogo, el hoy alcalde de Trujillo no vio con buenos ojos que le pusieran trabas a su proyecto y de manera ligera habría acusado al exdirector del referido proyecto de presuntamente realizar subastas públicas nocturnas para vender los huacos del recinto arqueológico.